Barbossa
A Fernando.
Me despertó la tormenta
confundí el aguacero con el sonido de las balas
tenía en la mente esa idea pendeja pero romántica de morir juntos
a tiros en un bar.
Vamos a morir aquí, pensé, aunque no sepa el nombre del lugar
es simple, alguien baja de una camioneta y abre el fuego.
Mientras pasa, nos calentamos el corazón con latas frías de cerveza
sentimos nuestras manos
tejemos historias de amor entre los desconocidos de las mesas de al lado,
ignoramos el olor a muerto y la tragedia
toda la sangre que se derramó a tan solo unos pasos nuestros.